Análisis de los datos de monitorización de CEM durante el apagón
Los monitores de CEM de Wavecontrol registraron la interrupción de las comunicaciones
El apagón masivo en Barcelona registrado con nuestro dispositivo MonitEM
El lunes 28 de abril, un apagón general afectó a España, Portugal y partes del sur de Francia. Este apagón masivo ocurrió mientras Wavecontrol celebraba su reunión anual de distribuidores en Barcelona, interrumpiendo abruptamente todas las actividades y presentaciones dirigidas a distribuidores de todo el mundo. Más allá del impacto inicial y la necesidad de adaptarse, tuvimos la oportunidad de ofrecer a nuestros asistentes una visión única del apagón gracias a nuestros dispositivos de monitorización de campos electromagnéticos (CEM).
Cuando falló la red eléctrica, los sistemas que dependen de electricidad dejaron de funcionar, incluidas las antenas de telecomunicaciones. Esta pérdida generalizada de energía afectó inevitablemente a los niveles de radiación CEM en la ciudad. El avanzado sistema de monitorización de CEM de Wavecontrol, MonitEM —diseñado para la medición continua de CEM— permaneció operativo durante todo el apagón gracias a que funciona de forma autónoma con paneles solares, registrando cuidadosamente los cambios en los niveles de CEM durante este evento inusual.
Podemos observar en este ejemplo que los niveles de exposición en esa ubicación varían, en condiciones normales, entre aproximadamente 1,7 V/m y 3,5 V/m. Los niveles más bajos se registran por la noche, cuando hay pocas personas utilizando la red, mientras que los niveles más altos se alcanzan durante el horario laboral, cuando el uso y el tráfico de red son mayores. Se puede ver que la evolución diaria de los niveles es bastante estable, oscilando entre el día y la noche. Sin embargo, las mediciones muestran claramente que algo ocurrió ese lunes: se registró una interrupción completa de las emisiones a las 12:34 h. El impacto del apagón en las emisiones de telecomunicaciones fue evidente. La recuperación de estas emisiones fue lenta y varió según la ubicación. En la localización monitoreada en Barcelona, las señales de telecomunicación no se recuperaron completamente hasta alrededor de las 22:00 h.
Este evento real ejemplifica la importancia de la monitorización continua de CEM. Incluso durante situaciones inesperadas como una falla importante en la red eléctrica, la capacidad de medir y registrar con precisión los niveles de CEM no solo proporciona datos de seguridad sobre la exposición humana a CEM, sino también información valiosa sobre el estado operativo de la infraestructura de comunicación. El compromiso de Wavecontrol con una monitorización de CEM fiable y autónoma garantiza que los datos de seguridad sobre CEM estén disponibles, incluso cuando las fuentes de alimentación principales fallan.
Beneficios de la monitorización de CEM
Monitorizar los campos electromagnéticos con soluciones como MonitEM y el nuevo MonitEM-IoT va más allá de una medición pasiva: se convierte en una herramienta activa para mejorar la calidad en diversos entornos. En el contexto de las ciudades inteligentes y áreas concurridas, como grandes eventos deportivos o conciertos, las señales de telecomunicación necesitan refuerzo para garantizar que el servicio no se vea afectado, lo que a menudo se traduce en la instalación de más antenas cerca de las personas. En estas ocasiones, el monitoreo autónomo 24/7 es clave para garantizar que los niveles de CEM no superen los límites de seguridad recomendados.
Nuestro último producto, el MonitEM-IoT, es una solución especialmente diseñada para estos escenarios, ya que su fácil instalación y diseño compacto permiten colocar múltiples sensores en estrecha proximidad. Además, se alimenta de manera autónoma mediante baterías de larga duración, lo que garantiza un monitoreo continuo incluso cuando las señales de EMF experimentan fluctuaciones significativas.
Para descubrir toda nuestra gama de soluciones de monitorización de CEM y cómo pueden beneficiar tus aplicaciones, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.